Pelayo Díaz, mi ídolo, ha tenido un error que le ha valido amenazas de muerte. Resulta que le gusta las pieles -no será el primero ni el último- y, ha acabado con muchas críticas. La cuestión es: que ya, en Cámbiame Challenge 2, pidió perdón por ello y, aun así, las críticas constantes seguían y seguían. La cosa ha acabado con que Frank Cuesta hizo un vídeo en Youtube, para todos aquellos que quieran verlo, dirigido al propio Pelayo. Un vídeo muy duro que me hace pensar en los salvajes que somos los humanos, cuando, y vamos de ecologistas y modernos y pacíficos, pero, nada más allá de la verdad. A causa del vídeo, el estilista también hizo otro de tres minutos donde agradecía a Frank que le abriera los ojos y, volvía a pedir disculpas por sus palabras.
Pero, como a saber por qué, suele pasar, auun hay gente que desconfia de sus palabras. Hasta tal punto que, cuando ven a uno de sus fans apoyando y aplaudiendo su valentía, porque dar ese paso atrás y rectificar es de valientes, también acaban por intentar ofenderlos solo por darle apoyo al estilista.
Tal cual me está pasando a mi solo por comentar que tiene un perrito llamado Hércules, muy mono. Que han habido usuarios, via Twitter, que me decían "pobre perro, seguro que le arrancará la piel para hacerse unos botines". A lo que yo respondía, y sin animo de ofender a nadie que, "si no lo había hecho ya con alguno anterior que haya tenido, con el actual tampoco". Y me he encontrado con gente que me decía que "chapara la boca", "chapero" y "demagoga" -en lugar de demagogo- por responderle a uno de los usuarios que, tal vez tenga en su círculo social, algún amigo, familiar o compañero de trabajo con el que se lleve bien, taurino, para saber que, una persona que le guste los toros tenga animales domésticos. Nunca he comentado nada para dañar a nadie, y si es así, lo lamento, como ya hice con el usuario que me insultó de chapero. También reconozco que me exalté en algunos momentos y pido perdón por las palabras escritas desde mi exaltación.
Como se suele decir: rectificar es de sabios y, nunca es tarde si la dicha es buena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario